Jesús envía a los discípulos a anunciar el reino de Dios
(Mt 10.5-15Mc 6.7-13)1 Jesús reunió a los doce discípulos, y les dio poder y autoridad para expulsar toda clase de demonios y para curar enfermedades. 2 Los envió a anunciar el reino de Dios y a sanar a los enfermos. 3 Les dijo:
—No lleven nada para el camino: ni bastón, ni provisiones, ni pan, ni dinero, ni ropa para cambiarse. 4 En cualquier casa a donde lleguen, quédense hasta que se vayan del lugar. 5 Y si en algún pueblo no quieren recibirlos, salgan de él y sacúdanse el polvo de los pies, para que les sirva a ellos de advertencia.
6 Ellos salieron y fueron por todas las aldeas; y en todos los lugares anunciaban la buena noticia y sanaban enfermos.
Incertidumbre de Herodes
(Mt 14.1-12Mc 6.14-29)7 Herodes, el que gobernaba en Galilea, oyó hablar de todo lo que sucedía; y no sabía qué pensar, porque unos decían que Juan había resucitado, 8 otros decían que el profeta Elías se había aparecido, y otros decían que alguno de los antiguos profetas había resucitado. 9 Pero Herodes dijo:
—Yo mismo mandé que le cortaran la cabeza a Juan. ¿Quién será entonces este, de quien oigo contar tantas cosas?
Por eso Herodes procuraba ver a Jesús.
Jesús da de comer a una multitud
(Mt 14.13-21Mc 6.30-44Jn 6.1-14)10 Cuando los apóstoles regresaron, contaron a Jesús todo lo que habían hecho. Él los llevó aparte, a un pueblo llamado Betsaida. 11 Pero cuando la gente lo supo, lo siguieron. Entonces Jesús los recibió a todos, les habló del reino de Dios y sanó a los enfermos.
12 Cuando ya comenzaba a oscurecer, los doce se acercaron a Jesús y le dijeron:
—Despide a la gente para que vayan por las aldeas y los campos de los alrededores a buscar alojamiento y comida, porque estamos en un lugar despoblado.
13 Jesús les dijo:
—Denles ustedes de comer.
Pero ellos contestaron:
—No tenemos más que cinco panes y dos pescados, tendríamos que ir a comprar alimentos para toda esta gente.
14 En efecto, había como cinco mil hombres. Entonces Jesús dijo a sus discípulos:
—Hagan que todos se sienten en grupos como de cincuenta.
15 Ellos así lo hicieron, y todos se sentaron. 16 Luego Jesús tomó en sus manos los cinco panes y los dos pescados y, mirando al cielo, pronunció sobre ellos la bendición, los partió y se los dio a sus discípulos para que los repartieran entre la gente. 17 Todos comieron hasta quedar satisfechos; y de los pedazos que sobraron se recogieron doce canastos.
Pedro declara que Jesús es el Mesías
(Mt 16.13-19Mc 8.27-29)18 Un día Jesús estaba orando a solas, en eso se acercaron sus discípulos, y él les preguntó:
—¿Quién dice la gente que soy yo?
19 Ellos contestaron:
—Algunos dicen que eres Juan el Bautista, otros dicen que eres Elías, y otros dicen que eres uno de los antiguos profetas, que ha resucitado.
20 —Y ustedes, ¿quién dicen que soy? —les preguntó.
Y Pedro le respondió:
—Tú eres el Mesías enviado por Dios.
21 Pero Jesús les encargó mucho que no dijeran esto a nadie.
Jesús anuncia su muerte
(Mt 16.20-28Mc 8.30—9.1)22 Les dijo también:
—El Hijo del hombre tendrá que sufrir mucho, y será rechazado por los ancianos, por los jefes de los sacerdotes y por los maestros de la ley. Lo matarán, pero al tercer día resucitará.
23 Después les dijo a todos:
—Si alguien quiere seguirme, olvídese de sí mismo, cargue con su cruz cada día y sígame. 24 Porque quien quiera salvar su vida la perderá, pero quien pierda la vida por causa de mí la salvará. 25 ¿De qué le sirve a uno ganar el mundo entero, si se pierde o se destruye a sí mismo? 26 Si alguien se avergüenza de mí y de mis palabras, también el Hijo del hombre se avergonzará de él cuando venga en su gloria y en la gloria del Padre y de los santos ángeles. 27 Les aseguro que algunos de los que están aquí presentes no morirán sin antes haber visto el reino de Dios.
La transfiguración de Jesús
(Mt 17.1-8Mc 9.2-8)28 Unos ocho días después de esta conversación, Jesús subió a un cerro a orar, y se llevó solo a Pedro, Santiago y Juan. 29 Mientras oraba, el aspecto de su rostro cambió, y su ropa se volvió muy blanca y brillante; 30 de repente aparecieron dos hombres conversando con él. Eran Moisés y Elías, 31 envueltos en un resplandor glorioso; hablaban acerca de la partida de Jesús, la cual iba a tener lugar en Jerusalén. 32 Y Pedro y los otros dos, aunque tenían mucho sueño, permanecieron despiertos y pudieron ver la gloria de Jesús, y a los dos hombres que estaban con él. 33 En el momento en que Moisés y Elías se alejaban de Jesús, Pedro le dijo:
—Maestro, ¡qué bien que estemos aquí! Hagamos tres enramadas: una para ti, otra para Moisés y otra para Elías.
Pero Pedro no sabía lo que decía; 34 y cuando aún estaba hablando, una nube se posó sobre ellos, y al verse envueltos en la nube tuvieron miedo. 35 Entonces de la nube salió una voz, que dijo: «Este es mi Hijo, mi elegido: ¡escúchenlo!»
36 Cuando se escuchó esa voz, Jesús estaba solo. Ellos mantuvieron esto en secreto, y durante ese tiempo no contaron nada a nadie de todo lo que habían visto.
Jesús sana a un muchacho poseído por un demonio
(Mt 17.14-20Mc 9.14-29)37 Al día siguiente, cuando bajaron del cerro, una gran multitud salió al encuentro de Jesús. 38 Y un hombre de entre la gente le gritó:
—Maestro, por favor, mira a mi hijo, que es el único que tengo; 39 un espíritu lo agarra, y hace que grite sin motivo, y que le den ataques y que eche espuma por la boca. Lo maltrata y no quiere soltarlo. 40 He rogado a tus discípulos que le saquen ese espíritu, pero no han podido.
41 Jesús contestó:
—¡Oh, gente incrédula y perversa! ¿Hasta cuándo tendré que estar con ustedes y soportarlos? Trae acá a tu hijo.
42 En el momento en que el muchacho se acercaba, el demonio lo tiró al suelo e hizo que le diera otro ataque; pero Jesús reprendió al espíritu impuro y sanó al muchacho, luego se lo devolvió a su padre. 43 Y todos se quedaron admirados de la grandeza de Dios.
Jesús anuncia por segunda vez su muerte
(Mt 17.22-23Mc 9.30-32)Mientras todos se maravillaban de lo que Jesús hacía, él dijo a sus discípulos:
44 —Oigan bien esto y no lo olviden: el Hijo del hombre va a ser entregado en manos de quienes lo matarán.
45 Pero ellos no entendían lo que les decía, pues todavía no se les había abierto el entendimiento para comprenderlo; además no se atrevían a preguntarle acerca de lo que decía.
¿Quién es el más importante?
(Mt 18.1-5Mc 9.33-37)46 Los discípulos comenzaron a discutir quién de ellos sería el más importante. 47 Jesús, al darse cuenta de lo que estaban pensando, tomó a un niño, lo puso junto a él, 48 y les dijo:
—Quien recibe a este niño en mi nombre me recibe a mí; y quien me recibe a mí recibe también al que me envió. Por eso, el más insignificante entre todos ustedes, ese es el más importante.
Quien no está contra nosotros está a nuestro favor
(Mc 9.38-40)49 Juan le dijo:
—Maestro, hemos visto a uno que expulsaba demonios en tu nombre y tratamos de impedírselo, porque no es de los nuestros.
50 Jesús le contestó:
—No se lo prohíban, porque quien no está contra nosotros está a nuestro favor.
Jesús reprende a Santiago y a Juan
51 Jesús, cuando ya se acercaba el tiempo de su partida al cielo, emprendió con valor su viaje a Jerusalén. 52 En el camino envió por delante a unos mensajeros para que le consiguieran alojamiento en una aldea de Samaria; 53 pero los samaritanos no quisieron recibirlo, porque se enteraron de que se dirigía a Jerusalén. 54 Cuando sus discípulos Santiago y Juan vieron esto, le dijeron:
—Señor, ¿quieres que ordenemos que baje fuego del cielo, y que acabe con ellos?
55 Pero Jesús se volvió y los reprendió. 56 Luego se fueron a otra aldea.
Para seguir a Jesús
(Mt 8.19-22)57 Mientras iban de camino, alguien le dijo a Jesús:
—Señor, yo te seguiré a dondequiera que vayas.
58 Jesús le contestó:
—Las zorras tienen cuevas y las aves tienen nidos; pero el Hijo del hombre no tiene dónde recostar la cabeza.
59 Jesús le dijo a otro:
—Sígueme.
Pero él respondió:
—Señor, déjame ir primero a enterrar a mi padre.
60 Jesús le contestó:
—Deja que los muertos entierren a sus muertos; tú ve y anuncia el reino de Dios.
61 Otro le dijo:
—Señor, quiero seguirte, pero primero déjame ir a despedirme de los de mi casa.
62 Jesús le contestó:
—El que pone la mano en el arado y sigue mirando atrás no es apto para el reino de Dios.
Jesús apkeláphasso apkeltáméséyak eltennaha m'a aptémakxa nak Wesse' apwányam Dios
(Mt 10.5-15Mc 6.7-13)1 Apcháncheseykekxeyk axta Jesús doce apkeltáméséyak, apkelmeyáseykegkek axta apkelmopwancha'a yaqwayam elántekkesek ekyókxoho mók ektémakxa nak chá'a kelyekhama', tén han emasseksek ma'a negháxamáxche'. 2 Apkeláphássegkek axta yaqwayam eltennaha m'a aptémakxa nak Wesse' apwányam Dios, tén han eltaqmelchessók ma'a élháxamáxche. 3 Axta aptemék apkelanagkama s'e:
—Nágkólsow aqsa xama aqsok enxoho yaqwayam kólmaha ámay: cham'a kéltasqapeykha nak, nahápa kélagkok, kélto, selyaqye, tén han kélántaxno yaqwayam enxoho kólyaqmagkasek pók. 4 Tegma kélwánxa enxoho chá'a, kólhakha sa' chá'a m'a ekwokmoho kélxegákxo makham. 5 Sa' agkok chá'a kólmáxchek takha' nátegma kélwánxa enxoho chá'a, kólántép sa' chá'a m'a, kólpalches sa' nahan chá'a kélmagkok xapop ánek, yaqwayam sa' melchenatchesek peya ellegássesagkohok Dios xa énxet'ák nak.
6 Apkelxegamchek axta xa énxet'ák nak, apkelmaheykegkek axta ekyókxoho nátegma, apkeltenneykencha'a chá'a m'a amya'a ektaqmela, tén han apkeltaqmelchesseykmo chá'a élháxamáxche'.
Herodes mey'áseyak aptémakxa
(Mt 14.1-12Mc 6.14-29)7 Aplegayak axta amya'a Herodes ekxénamaxko ekyókxoho m'a ektémakxa axta; axta ey'áseykegkok yaqweykenxa etnehek élchetamso apwáxok, hakte nápakha énxet axta chá'a apkelxeyenmak apxátekhágweykmo m'a Juan, 8 nápakha axta nahan chá'a apkelxeyenmak apweykto makham ma'a Dios appeywa aplegasso Elías, nápakha axta nahan chá'a apkelxeyenmak xama m'a nano' Dios appeywa apkellegasso axta. 9 Keñe axta Herodes aptéma appeywa s'e:
—Ko'o ahagko' axta séltémo kólyaqténchesek apyespok ma'a Juan. ¿Yaqsa eyke kexaha énxet ma'a, seklegaya nak chá'a ko'o exénakpok elának aqsok ekxámokma agko'?
Axta keñamak Herodes apkelenxáneykmo étak ma'a Jesús.
Jesús apkelmeyáseyak aptéyak énxet apxámokma
(Mt 14.13-21Mc 6.30-44Jn 6.1-14)10 Xama axta apkelweykekxo makham ma'a Jesús apkelápháseykha, apkeltennáseykha axta Jesús ma'a ektémakxa axta aqsok apkelánéyak. Apnaqlamchek axta apxakcha'awók Jesús xa, apkelya'assegkek axta m'a nátegma ekwesey axta Betsaida. 11 Xama axta apkellegaya amya'a m'a énxet'ák, apkemheykegkek axta; apkelmomchek axta nahan takha' m'a Jesús, apkeltennáseykha axta m'a aptémakxa nak Wesse' apwányam Dios, apkeltaqmelchesseykmek axta anhan ma'a élháxamáxche.
12 Xama axta nahan ektaxneykmo, apya'eykekxeyk axta aphakxa Jesús ma'a doce apkeltáméséyak. Axta aptemék apkenagkama s'e:
—Eláphés sa' énxet'ák, yaqwayam sa' ellókassekxak apkelyampe, tén han etegyagkok aptéyak ma'a nátegma, tén han ma'a yókxexma eyágketexa nak, hakte méko aqsok se'e yókxexma nak.
13 Axta aptemék apkelanagkama Jesús se'e:
—Kólmésák kéxegke aptéyak.
Axta aptemék apkelátegmoweykegkokxo s'e:
—Cinco pan akke aqsa negko'o apyetna tén han ánet kelasma, apkeltamhók enxeykel'a exchep antegyássekxak negko'o aptéyak apyókxoho xa énxet'ák nak.
14 Hakte cinco mil axta apyókxoho m'a apkelennay'a. Axta eyke aptemék apkelanagkama apkeltáméséyak Jesús se'e:
—Kólána sa' elyaqyesagkok apheykha. Cincuenta sa' chá'a etnehek apyókxoho.
15 Aptamheykegkek axta nahan ma'a apkeltémókxa axta etnahagkok, apkeltémok axta chá'a exnakha apyókxoho énxet. 16 Tén axta Jesús apkelmoma m'a cinco pan nak, tén han ma'a ánet kelasma, apsekheykekxók axta néten, keñe apméssama ekxeyenma apwáxok Dios, apkelyeptégkek axta pan, tén axta apkelmeyáseykegko m'a apkeltáméséyak yaqwayam enxoho emlaskok nepyeseksa m'a énxet'ák. 17 Apteykegkek axta nahan énxet'ák ekwokmoho apkelyaqkáneykmo, doce axta anhan weykmok kélxatméyak apkelmeykekxa m'a apkeleymomap axta nápakha'a.
Pedro apxeyenma Jesús apteme Mesías
(Mt 16.13-19Mc 8.27-29)18 Xama ekhem axta aptemék apxakkók nempeywa nélmaxnagko m'a Jesús, apkeltáméséyak axta nahan apkelxegexma'a, axta aptemék apkelmaxneyeykencha'a s'e:
—¿Háxko aptémakxa chá'a ko'o sexeyenma m'a énxet'ák?
19 Axta aptemék apkelátegmoweykegko s'e:
—Nápakha énxet chá'a apxeyenmak xép apteme Juan el Bautista, nápakha nahan chá'a apkelxeyenmak apteme Elías, nápakha nahan chá'a apkelxeyenmak xeyep apteme xama m'a Dios appeywa apkellegasso nanók axta, apxátekhágweykmo makham.
20 —Kéxegke nahan, ¿háxko kéltémakxa chá'a sélxeyenma ko'o? —axta aptemék apkelmaxneyeykencha'a.
Keñe axta Pedro aptéma apchátegmoweykegko s'e:
—Xép apteme Mesías apkeñama Dios.
Jesús apxeyenma yaqwayam yetsapok
(Mt 16.20-28Mc 8.30—9.1)21 Apkeltémók axta eyke meltennaksek xama énxet enxoho Jesús apkeltáméséyak xa. 22 Tén axta aptéma apkelanagkama s'e:
—Megkatnehek sa' ko'o mañeykegkoho ekyentaxno agko', ko'o sektáha nak Apketche énxet, hetaqnók sa' ma'a apkelámha apmonye'e nak, tén han ma'a apkelámha apmonye'e nak apkelmaxnéssesso Dios énxet'ák apagkok, tén han ma'a apkelxekmósso nak apnámakkok ektémakxa segánamakxa. Heyaqhek sa', ántánxo ekhem sa' eyke katnehek hélxátekhassók makham.
23 Tén axta aptéma apkelanagkama apyókxoho énxet'ák se'e:
—Kélmakók agkok kóltéhek kélxama kéxegke séltáméseyak, kólwátésák ma'a kélmáheyókxa kélagko' nak chá'a kóltéhek, kólpátem aqsok ektegyésso kélagkok yókxoho ekhem, keñe sa' hélyetlógma. 24 Hakte kéxegke ektáhakxa enxoho kélmasma ektémakxa nak kélyennaqte, kólmassegwók sa'; keñe sa' kéxegke ektáhakxa enxoho kéletsapma eñama ko'o, kólwetágwók sa' kélyennaqte. 25 ¿Kapasmoya énxet apwete nak ekyókxoho aqsok keso náxop apketsapa enxoho essenhan aptawáseykpo apagko' enxoho? 26 Hakte apmegqakkek agkok ko'o sélano kélxama kéxegke, tén han ma'a sekpeywa, emegqeyk sa' han elanok ma'a apteme nak Apketche énxet, cham'a apwa'akto sa' yetlo apcheymákpoho, tén han apcheymákpoho m'a Apyáp, tén han yetlo m'a apkelásenneykha apkelpagkanamap nak. 27 Naqsók ko'o sektáha séláneya kéxegke nápakha apheyncha'a nak se'e, meletsepek sa' mét'a enxoho makham kawak ma'a aptémakxa nak Wesse' apwányam Dios.
Jesús élyenmeykekxa apyókxa
(Mt 17.1-8Mc 9.2-8)28 Ocho ekhem axta temék ekyeykhe xa apkelpaqhetchásamákpoho axta, apkenátweykmek axta néten egkexe Jesús apmáheyo etnehek nempeywa nélmaxnagko, yetlo apxegexma m'a Pedro, Santiago tén han ma'a Juan. 29 Yaqmagkassegkek axta nahan ektémakxa nápat neyseksa apteme nempeywa nélmaxnagko, apmope apagko' axta nahan aptamheykekxak ma'a aptaxno, tén han apkelyenma; 30 apkelyephagwayak axta anhan apqánet énxet apkelpaqhetchásamákpoho m'a Jesús. Moisés axta m'a tén han Elías; 31 wakhayak axta nahan élseyéxma eyeymáxkoho; apkelxeyenmeyk axta yaqweykenxa katnehek apketsapma m'a Jesús tén han ekmáheyo kapayhohok katnehek ma'a Jerusalén. 32 Apyenmeykha apagko' axta eyke m'a Pedro tén han ma'a apkelxegexma'a, axta eyke enaqteyenmak, apkelweteyak axta Jesús élseyéxma apagkok, tén han apqánet énxet apkelpaqhetchásamápoho axta m'a. 33 Xama axta apyenyeykekxo Jesús ma'a apqánet énxet nak, axta aptemék apkenagkama Pedro s'e:
—Sẽlxekmósso, ¡ektaqmelakxoho agko' nak la'a nélwa'a negko'óxa s'e! Anlának sa' negko'o apqántánxo tegma apketkók: xama sa' apagkok xép, keñe sa' nahan ma'a Moisés, keñe sa' nahan xama m'a Elías.
Axta eyke ey'áseykegkok aqsok apxeyenma m'a Pedro. 34 Cháhapwayak axta nahan xama yaphope neyseksa appaqmeyesma, xama axta apkelweteya apchaqneykencha'a kañe' yaphope, apkeláyak axta. 35 Keñe axta ekteyapma kélpeywa m'a neyseksa yaphope. Axta entemék se'e: “Keso hatte ko'o s'e, apteme axta sélyéseykha, kóleyxho sa' appeywa.”
36 Xama axta eklegamaxko xa kélpeywa nak, apxakkók axta aptamheykekxak ma'a Jesús. Appóssegkek axta eyke aqsa apkeltáméséyak xa aqsok nak, axta eltennáseykha xama énxet ma'a ektémakxa axta aqsok apkelwete.
Jesús aptaqmelchesseyam wokma'ák ekha axta apwáxok espíritu ekmaso
(Mt 17.14-21Mc 9.14-29)37 Mók ekhem axta entemék, apkelánteyepmeyk axta apkeleñama m'a néten egkexe, apkelanyexeykegkek axta nahan énxet apxámokma m'a Jesús. 38 Keñe axta xama énxet aptéma apyennaqtéssamo appeywa nepyeseksa énxet se'e:
—Sẽlxekmósso, elano hana hatte, hakte wánxa ko'o xama hatte s'e; 39 kamok chá'a espíritu ekmaso, keñe kapeykessesha chá'a apátog, keytlawhok nahan chá'a ektemessáseykekxa', tén han ektekkessesso ekyaqmope apwáxok. Katwasagkohok chá'a, yámenyeyk nahan kayenyekxa'. 40 Éltamhók xeykhe ko'o etekkesek apkeltáméséyak xa espíritu ekmaso nak, mopwancha'ak xeyke.
41 Axta aptemék apchátegmoweykegko Jesús se'e:
—¡Énxet apkelya'ásseyam, tén han élmasagcha'a kéltémakxa! ¿Háxko sa' ekwánxa ekhem kammok sekha ko'o kélnepyeseksa kéxegke tén han alenmaxaxkohok kéltémakxa? Éntemegma apketche s'e.
42 Xama axta apyepetchegweykmoho Jesús ma'a wokma'ák nak, yaqnegkessegkek axta náxop ma'a kelyekhama', temessáseykekxeyk axta makham; appaqhetchessegkek axta eyke Jesús ma'a espíritu ekmaso, aptaqmelchesseykmek axta nahan ma'a wokma'ák nak, tén axta apmeyáseykekxo m'a apyáp. 43 Kelpelakkassegkek axta nahan apkelweteya apyókxoho énxet ektémakxa ekyawe agko' apmopwána m'a Dios.
Jesús apxéneykekxoho makham yaqwayam yetsapok
(Mt 17.22-23Mc 9.30-32)Axta aptemék apkelanagkama apkeltáméséyak Jesús neyseksa ekpelakkasso apkelwete apyókxoho énxet'ák ektáhakxa aqsok apkelane s'e:
44 —Kóltaqmelchesho sa' kélháxenmo s'e. Nágkalwagqamák nahan: Kólmések sa' énxet'ák ma'a ektáha nak Apketche énxet.
45 Axta eyke elya'áseykegkok apkeltáméséyak ma'a aptémakxa axta apkelanagkama, hakte axta elxaweyk makham yaqwayam elya'asagkoho'; apkeláyak axta nahan yának eltennásekxohok ma'a Jesús.
¿Yaqsa ektáhakxa ekyawe agko' kéláyo?
(Mt 18.1-5Mc 9.33-37)46 Apkelpaqmeyesmeyk axta nahan Jesús apkeltáméséyak apkelxeyenma yaqsa ektáhakxa ekyawe agko' kéláyo m'a nepyeseksa. 47 Xama axta apyekpelchama Jesús ektémakxa élchetamso apkelwáxok ma'a apkeltáméséyak, apmomchek axta xama sakcha'a, apkenegkáseykha axta apkenmeykegkaxa, 48 tén axta aptéma apkelanagkama s'e:
—Kélxama ektáhakxa enxoho kélmà takha' s'e sakcha'a nak yetlo kélxeyenma sekwesey, hemok nahan ko'óxa takha'; keñe nahan énxet ektáhakxa enxoho semà takha' ko'o, emok nahan takha' m'a aptáha axta seyáphasso ko'o. Ékeso éñamakxa énxet meyke kéláyo nak kélnepyeseksa kéxegke, cháxa apteme ekyawe kéláyo xa.
Segwéhenayo ektáha nak mehenmexeykha negko'o
(Mc 9.38-40)49 Axta aptemék apkenagkama Juan se'e:
—Sẽlxekmósso, negweteyak axta negko'o xama énxet apkelántekkessama kelyekhama' yetlo apxeyenma apwesey exchep; axta eyke negko'o óghayo', hakte háwe axta nenxegexma.
50 Axta aptemék apchátegmoweykegko Jesús se'e:
—Nágkólnókasha aqsa, hakte hegwéhenhok chá'a negko'o m'a mehenmexeykha nak.
Jesús appaqhetchesso Santiago tén han Juan
51 Xama axta eyágketweykmo ekhem yaqweykenxa emyekxak néten ma'a Jesús, apxegamchek axta apmeyeykekxo Jerusalén yetlo megyeye. 52 Apkeláphassegkek axta amonye'e m'a apkelápháseykha, cham'a apkelmaheykegko axta xama apheykegkaxa énxet ma'a Samaria yaqwayam enxoho etegyaha yaqwánxa exnók; 53 axta eyke emáheyók emok takha' m'a énxet'ák Samaria, hakte apkelya'áseykegkók axta apmeyeykekxo Jesús ma'a Jerusalén. 54 Xama axta apkelweteya apkeltáméséyak xa, cham'a Santiago tén han Juan, axta aptemék apkenagkama s'e:
—Wesse', ¿apmenyéya agának negko'o kaweywenták táxa eñama néten yaqwayam sa' kasawhohok xa énxet'ák nak?
55 Appeynchamakpók axta eyke m'a Jesús, keñe axta apkelpaqhetchessama ekyennaqte. 56 Tén axta apkelmeyeykekxo makham mók apheykegkaxa énxet.
Énxet'ák apmáheyo nak étlawha Jesús
(Mt 8.19-22)57 Neyseksa apkelxega axta ámay, aptéma apkenagkama Jesús xama énxet se'e:
—Wesse', émenyeyk eykhe ko'o eytlawha exchep ma'a apmahágkaxa enxoho chá'a. 58 Axta aptemék apchátegmoweykegko Jesús se'e:
—Yetneyk máxek axanák ma'a yammáleg, yetneyk nahan axanák ma'a náta; méko eyke apteyáyam ma'a aptáha nak Apketche énxet.
59 Axta aptemék nahan Jesús apkenagkama m'a pók énxet nak:
—Hétlógma exchep.
Tén axta aptéma apchátegmoweykegko s'e:
—Wesse', heyho sekxók wátawañegwakxak táta aphápak.
60 Axta aptemék apchátegmoweykegkokxo Jesús se'e:
—Yoho elátawanyek apkeletsapma m'a apkeletsapma nak; exeg xép, eltennaha m'a aptémakxa nak Wesse' apwányam Dios.
61 Keñe axta nahan pók énxet aptéma apkenagkama Jesús se'e:
—Wesse', ekmakók ko'o exchep eytlawha, heyho sa' sekxók alpeykessekxak ma'a ekheykha nak exagkok.
62 Axta aptemék apchátegmoweykegko Jesús se'e:
—Énxet appeyncheyam nak xapop, apkelpeynchamakpoho nak chá'a neptámen, mopwanchek etxek ma'a aptémakxa nak Wesse' apwányam Dios.