La misericordia del Señor
1 ¡Alabemos al Señor, porque él es bueno!
¡Su misericordia permanece para siempre!
2 Alabemos al Dios de dioses;
¡su misericordia permanece para siempre!
3 Alabemos al Señor de señores;
¡su misericordia permanece para siempre!

4 El Señor hace grandes maravillas.
¡Su misericordia permanece para siempre!
5 El Señor creó los cielos con sabiduría.
¡Su misericordia permanece para siempre!
6 El Señor extendió la tierra sobre las aguas.
¡Su misericordia permanece para siempre!
7 El Señor formó las grandes lumbreras.
¡Su misericordia permanece para siempre!
8 El Señor hizo el sol para dominar en el día.
¡Su misericordia permanece para siempre!
9 Y la luna y las estrellas para dominar en la noche.
¡Su misericordia permanece para siempre!

10 El Señor hirió de muerte a los primogénitos egipcios.
¡Su misericordia permanece para siempre!
11 El Señor sacó de Egipto a los israelitas.
¡Su misericordia permanece para siempre!
12 Lo hizo con mano fuerte y brazo extendido.
¡Su misericordia permanece para siempre!
13 El Señor partió en dos el Mar Rojo.
¡Su misericordia permanece para siempre!
14 El Señor hizo pasar por él a Israel.
¡Su misericordia permanece para siempre!
15 El Señor sepultó en el Mar Rojo al faraón y a su ejército.
¡Su misericordia permanece para siempre!
16 El Señor condujo a su pueblo por el desierto.
¡Su misericordia permanece para siempre!
17 El Señor hirió de muerte a grandes reyes.
¡Su misericordia permanece para siempre!
18 El Señor les quitó la vida a reyes poderosos.
¡Su misericordia permanece para siempre!
19 A Sijón, el rey de los amorreos.
¡Su misericordia permanece para siempre!
20 También a Og, el rey de Basán.
¡Su misericordia permanece para siempre!
21 Esas tierras se las dio en propiedad a su pueblo.
¡Su misericordia permanece para siempre!
22 Fueron la herencia de su pueblo Israel.
¡Su misericordia permanece para siempre!

23 El Señor se acuerda de nosotros cuando estamos abatidos.
¡Su misericordia permanece para siempre!
24 El Señor nos libra de nuestros enemigos.
¡Su misericordia permanece para siempre!
25 El Señor alimenta a todos los seres vivos.
¡Su misericordia permanece para siempre!

26 ¡Alabemos al Dios de los cielos!
¡Su misericordia permanece para siempre!
SALMO 136 (135)
Amor eterno de Dios a Israel
1 Demos gracias al Señor, porque él es bueno,
porque su amor es eterno.
2 Demos gracias al Dios de dioses,
porque su amor es eterno.
3 Demos gracias al Señor de señores,
porque su amor es eterno.
4 Al único que hace grandes maravillas,
porque su amor es eterno.
5 Al que hizo los cielos con sabiduría,
porque su amor es eterno.
6 Al que extendió la tierra sobre las aguas,
porque su amor es eterno.
7 Al que hizo el sol y la luna,
porque su amor es eterno:
8 el sol, para alumbrar de día,
porque su amor es eterno;
9 la luna y las estrellas, para alumbrar de noche,
porque su amor es eterno.
10 Al que hirió al primer hijo de toda familia egipcia,
porque su amor es eterno.
11 Al que sacó de Egipto a los israelitas,
porque su amor es eterno;
12 y con gran poder extendió su brazo,
porque su amor es eterno,
13 y partió en dos el mar Rojo,
porque su amor es eterno.
14 Hizo pasar a Israel por en medio del mar,
porque su amor es eterno.
15 Hundió en el mar Rojo al faraón y su ejército,
porque su amor es eterno.
16 Y llevó a su pueblo por el desierto,
porque su amor es eterno.
17 Hirió de muerte a grandes reyes,
porque su amor es eterno.
18 A reyes poderosos les quitó la vida,
porque su amor es eterno:
19 a Sijón, el rey amorreo,
porque su amor es eterno;
20 y a Og, el rey de Basán,
porque su amor es eterno.
21 Repartió la tierra de esos reyes,
porque su amor es eterno,
22 y la dio como herencia a su siervo Israel,
porque su amor es eterno.
23 Se acuerda de nosotros cuando estamos abatidos,
porque su amor es eterno.
24 Y nos libra de nuestros enemigos,
porque su amor es eterno.
25 Da de comer a hombres y animales,
porque su amor es eterno.
26 ¡Demos gracias al Dios del cielo,
porque su amor es eterno!