La bondad de Dios por los desposeídos
Aleluya.
1 Ustedes, siervos del Señor, ¡alábenlo!
¡Alaben el nombre del Señor!
2 ¡Bendito sea el nombre del Señor
desde ahora y para siempre!
3 ¡Alabado sea el nombre del Señor
desde la salida del sol hasta su ocaso!
4 El Señor está por encima de todas las naciones;
¡su gloria sobrepasa las alturas de los cielos!
5 ¿Quién como el Señor nuestro Dios?
El Señor tiene su trono en las alturas,
6 pero se digna inclinarse para ver
lo que ocurre en el cielo y en la tierra.
7 El Señor levanta de la nada al pobre,
y saca del muladar al pordiosero,
8 para darles a los dos un lugar entre los príncipes,
entre los gobernantes de su pueblo.
9 El Señor concede a la mujer estéril
un hogar y la alegría de tener hijos.
¡Aleluya!
SALMO 113 (112)
Alabanza a la bondad del Señor
1 ¡Aleluya!
Siervos del Señor, ¡alaben su nombre!
2 ¡Bendito sea ahora y siempre
el nombre del Señor!
3 ¡Alabado sea el nombre del Señor
del oriente al occidente!
4 El Señor está por encima de las naciones;
¡su gloria está por encima del cielo!
5 Nadie es comparable al Señor nuestro Dios,
que reina allá en lo alto;
6 y que, sin embargo, se inclina
para contemplar el cielo y la tierra.
7 El Señor levanta del suelo al pobre,
y del lugar más bajo saca al necesitado
8 para sentarlo entre gente importante,
entre la gente importante de su pueblo.
9 A la mujer que no tuvo hijos
le da la alegría de ser madre
y de tener su propio hogar.
¡Aleluya!