Consagración de Aarón y de sus hijos
(Ex 29.1-37)
1 El Señor habló con Moisés, y le dijo:
2 «Toma a Aarón y a sus hijos, junto con las vestiduras, el aceite de la unción, el becerro de la expiación, los dos carneros, y el canastillo de los panes sin levadura,
3 y reúne a toda la congregación a la entrada del tabernáculo de reunión.»
4 Moisés hizo lo que el Señor le mandó, y se reunió la congregación a la entrada del tabernáculo de reunión.
5 Allí le dijo a la congregación:
«Esto es lo que el Señor ha ordenado hacer.»
6 Entonces Moisés hizo que Aarón y sus hijos se acercaran, y los lavó con agua;
7 luego le puso a Aarón la túnica, le ciñó el cinto, lo cubrió con el manto, le puso el efod, y le ajustó el cinto del efod.
8 Luego le puso encima el pectoral, y dentro de este puso el Urim y el Tumim.
9 Después le puso la mitra sobre la cabeza, y sobre la mitra, por el frente, colocó la placa de oro, la diadema santa, tal y como el Señor se lo había ordenado.
10 Moisés tomó entonces el aceite de la unción y ungió el tabernáculo y todo lo que en él había, y lo santificó.
11 Siete veces roció el aceite sobre el altar, y ungió el altar y todos sus utensilios, lo mismo que la fuente y su base, para santificarlos.
12 Luego derramó algo del aceite de la unción sobre la cabeza de Aarón, y lo ungió para santificarlo.
13 Después hizo que los hijos de Aarón se acercaran, y les puso las túnicas, les ciñó los cintos y les ajustó las tiaras, tal y como el Señor se lo había ordenado.
14 Luego Moisés mandó traer el becerro de la expiación, y Aarón y sus hijos pusieron sus manos sobre la cabeza de ese becerro
15 y Moisés lo degolló; luego tomó la sangre y con su dedo la untó sobre los cuernos del altar y alrededor del altar, y así lo purificó. El resto de la sangre la echó al pie del altar, y santificó el altar para realizar allí la reconciliación.
16 Después Moisés tomó toda la grasa que recubría los intestinos, la grasa del hígado, y los dos riñones con su grasa, y todo esto lo quemó sobre el altar.
17 El becerro y su piel, y su carne y estiércol, Moisés los quemó fuera del campamento, tal y como el Señor se lo había ordenado.
18 Después Moisés mandó traer el carnero del holocausto. Aarón y sus hijos pusieron sus manos sobre la cabeza del carnero,
19 y Moisés lo degolló y roció la sangre sobre el altar y alrededor de este,
20 y cortó el carnero en trozos, después de lo cual quemó la cabeza, los trozos, y la grasa;
21 luego enjuagó los intestinos y las piernas, y quemó todo el carnero sobre el altar como holocausto de olor grato para el Señor, como ofrenda encendida, tal y como el Señor se lo había ordenado.
22 Después Moisés mandó traer el otro carnero, el de las consagraciones. Aarón y sus hijos pusieron sus manos sobre la cabeza del carnero,
23 y Moisés lo degolló; tomó luego un poco de la sangre y la untó sobre el lóbulo de la oreja derecha de Aarón, sobre el dedo pulgar de su mano derecha, y sobre el dedo gordo de su pie derecho.
24 Luego Moisés hizo que los hijos de Aarón se acercaran, y untó un poco de la sangre sobre el lóbulo de sus orejas derechas, sobre los pulgares de sus manos derechas, y sobre los dedos gordos de sus pies derechos, y finalmente roció la sangre sobre el altar y alrededor de este.
25 Después Moisés tomó la grasa, la cola, toda la grasa que recubría los intestinos, la grasa del hígado, los dos riñones con su grasa, y la espaldilla derecha.
26 Del canastillo de los panes sin levadura, que estaba delante del Señor, tomó una torta sin levadura, una torta de pan con aceite y una hojaldra, y las puso junto con la grasa y la espaldilla derecha.
27 Todo esto lo puso en las manos de Aarón y de sus hijos, y mandó que se presentara como ofrenda mecida delante del Señor.
28 Después Moisés tomó todo eso de las manos de ellos, y lo quemó en el altar, sobre el holocausto como consagración en olor grato para el Señor, como ofrenda encendida.
29 Entonces Moisés tomó el pecho y lo presentó como ofrenda mecida delante del Señor. Del carnero de las consagraciones, esa fue la porción asignada a Moisés, tal y como el Señor se lo había ordenado.
30 Después Moisés tomó algo del aceite de la unción y de la sangre que estaba sobre el altar, y los roció sobre Aarón y sus vestiduras, y sobre sus hijos y las vestiduras de ellos, y santificó a Aarón y sus vestiduras, lo mismo que a sus hijos y a las vestiduras de ellos,
31 y les dijo Moisés a Aarón y a sus hijos:
«Hiervan la carne a la entrada del tabernáculo de reunión, y cómanla allí con el pan que está en el canastillo de las consagraciones, tal y como yo lo ordené cuando dije que Aarón y sus hijos lo comieran.
32 Lo que sobre de la carne y del pan lo quemarán.
33 Durante siete días no saldrán del tabernáculo de reunión, hasta que se cumplan los días de sus consagraciones, porque serán consagrados durante siete días.
34 El Señor ordenó que se hiciera expiación por ustedes tal y como hoy se ha hecho.
35 Así que ustedes permanecerán día y noche, durante siete días, a la entrada del tabernáculo de reunión, y cumplirán con esta ordenanza delante del Señor, para que no mueran. Esto es lo que se me ha ordenado.»
36 Y Aarón y sus hijos hicieron todo lo que por medio de Moisés el Señor ordenó que se hiciera.
Consagración de Aarón y de sus hijos
(Ex 29.1-37)
1 El Señor se dirigió a Moisés y le dijo:
2 «Toma a Aarón y a sus hijos, y toma además las vestimentas sacerdotales, el aceite de consagrar, el becerro que se sacrifica por el pecado, los dos carneros y el canastillo de los panes sin levadura, 3 y reúne a toda la comunidad a la entrada de la tienda del encuentro.»
4 Moisés hizo lo que el Señor le había ordenado, y la comunidad se reunió a la entrada de la tienda del encuentro. 5 Allí Moisés dijo a la comunidad: «Esto es lo que el Señor ha ordenado que se haga.»
6 Luego Moisés hizo que Aarón y sus hijos se acercaran, y los lavó con agua. 7 Después le puso a Aarón la túnica, le ajustó el cinturón y lo vistió con la capa; luego le puso encima el efod y se lo ajustó bien con la misma cinta del efod. 8 Luego le puso encima el pectoral, y en el pectoral puso el Urim y el Tumim. 9 Luego le puso el turbante en la cabeza, y sobre él, por la parte de enfrente, colocó la placa de oro que lo consagraba como sacerdote, tal como el Señor se lo había ordenado.
10 Después Moisés tomó el aceite de consagrar y lo derramó sobre el santuario y sobre todo lo que había allí dentro, y así lo consagró. 11 Con el mismo aceite roció el altar siete veces, y lo derramó sobre el altar y sobre todos sus utensilios, y también sobre la palangana y su base, para consagrarlos.
12 Luego Moisés derramó el aceite de consagrar sobre la cabeza de Aarón para consagrarlo como sacerdote. 13 Hizo también que los hijos de Aarón se acercaran, y los vistió con las túnicas, les ajustó los cinturones y les puso los turbantes, tal como el Señor se lo había ordenado.
14 Después Moisés mandó traer el becerro que se sacrifica por el pecado, y Aarón y sus hijos pusieron sus manos sobre la cabeza del becerro. 15 Entonces Moisés lo degolló y, tomando sangre con sus dedos, la untó en los cuernos alrededor del altar, para purificarlo, y la sangre restante la derramó al pie del altar. Así el altar quedó consagrado para obtener allí el perdón de los pecados.
16 Después Moisés tomó toda la grasa que cubre las vísceras, la parte grasosa que está sobre el hígado y los dos riñones con su grasa, y lo quemó todo sobre el altar; 17 pero al resto del becerro, es decir, su piel, carne y desechos, les prendió fuego fuera del campamento, tal como el Señor se lo había ordenado.
18 Moisés hizo que acercaran el carnero que se ofrece en holocausto, y Aarón y sus hijos pusieron las manos sobre la cabeza del carnero. 19 Luego Moisés lo degolló y roció con la sangre los costados del altar, 20 cortó el carnero en pedazos y quemó la cabeza, los pedazos y la grasa; 21 luego lavó con agua las vísceras y las piernas del carnero, y lo quemó todo en el altar como holocausto, como ofrenda de aroma agradable al Señor, tal como el Señor se lo había ordenado.
22 Luego Moisés hizo que trajeran el otro carnero, el de la ceremonia de consagración, y Aarón y sus hijos pusieron las manos sobre la cabeza del carnero. 23 Moisés lo degolló y, tomando un poco de sangre, se la untó a Aarón en la parte inferior de la oreja derecha, en el pulgar de la mano derecha y en el dedo gordo del pie derecho. 24 Luego hizo que se acercaran los hijos de Aarón, y también les untó sangre en la parte inferior de su oreja derecha, en el pulgar de la mano derecha y en el dedo gordo del pie derecho; después roció con la sangre los costados del altar.
25 Luego Moisés tomó la grasa, la cola, toda la grasa que cubre las vísceras, la parte grasosa que está sobre el hígado, los dos riñones con su grasa, y el muslo derecho. 26 Del canastillo de los panes sin levadura que se pone ante el Señor, Moisés tomó una torta sin levadura, una torta amasada con aceite y una hojuela, y las puso junto con las grasas y el muslo derecho; 27 luego puso todo esto en las manos de Aarón y de sus hijos, para que hicieran ante el Señor el rito de presentación. 28 A continuación, recogió Moisés todo esto de manos de ellos, y lo quemó en el altar junto con el holocausto, como ofrenda de consagración de aroma agradable: ofrenda quemada en honor del Señor.
29 Después Moisés tomó el pecho y celebró ante el Señor el rito de presentación. Esa parte del carnero de la consagración fue la que le tocó a Moisés, tal como el Señor se lo había ordenado.
30 Tomó luego Moisés un poco de aceite de consagrar y de la sangre que estaba sobre el altar, y los roció sobre Aarón y sus hijos, así como sobre la vestimenta sacerdotal de todos ellos. Así consagró a Aarón y a sus hijos, y la vestimenta sacerdotal de todos ellos.
31 Después Moisés les dijo a Aarón y a sus hijos: «Cuezan la carne a la entrada de la tienda del encuentro, y cómanla allí mismo con el pan del canastillo de las consagraciones, tal como el Señor me lo ordenó cuando dijo: “Aarón y sus hijos comerán esta carne.” 32 Quemen después la carne y el pan que sobren, 33 y durante siete días, que es lo que dura el período de su consagración, no se alejen de la entrada de la tienda del encuentro. 34 El Señor ha ordenado que el rito para obtener el perdón de los pecados cometidos por ustedes se haga tal como se ha hecho hoy. 35 Por lo tanto, durante siete días ustedes deberán quedarse día y noche a la entrada de la tienda del encuentro. Respeten la orden del Señor y no morirán, pues esa es la orden que recibí.»
36 Y Aarón y sus hijos hicieron todo lo que el Señor había ordenado por medio de Moisés.